
La vida es dura, es difícil. Las relaciones son demasiado complicadas. La mujer no es una princesa ni el hombre un príncipe. Parir duele. La crianza es fuerte. Ser madre o padre desespera. La mujer real tiene celulitis y estrías. La vida no es color de rosa. Nada dura para siempre.
La percepción de la realidad como dura, fuerte, dolorosa, triste, caótica impera. Todo eso que mencioné al principio puede ser verdad, pero no es la única verdad. Lo bueno existe y es posible, pero nos han convencido que “is too good to be true”. Nos han hecho creer que lo “real”, lo “verdadero” es hostil e infame, por eso somos escépticos a la felicidad.
Sí, la vida es dura y también es suave. Las relaciones son complicadas y llevaderas. Podemos ser príncipes y princesas; reyes y reinas; guerreros y guerras. Parir es doloroso y es glorioso. Criar es fuerte y sublime. Ser padre o madre desespera y revitaliza. La mujer real tiene celulitis y estrías, y la que tiene su abdomen tonificado también es real. La vida no es color rosa, porque no es de un solo color. Nada dura para siempre, pero hay muchas cosas que pueden durar lo suficiente.
No hay que escoger una o la otra. Es entender que coexisten ambas al mismo tiempo: caos y calma, alegrías y tristezas, obstáculos y logros, escasez y fortuna. Todo es real.
Andamos buscando la felicidad pensando que el lugar natural y real donde estar es el sufrimiento. Que mientras pasan cosas terribles no hay razones para sentirse bien. ¿Qué hace ese padre o es madre que recibió la noticia de que su hijo combatió el cáncer el mismo día que murieron cien? ¿No se puede alegrar por sí y seguir sintiendo empatía por los demás? No seamos irreales… A veces en medio del dolor más terrible, podemos sentirnos afortunados.
Somos todo y todo existe a la vez…
Dejemos de idealizar tanto el sufrimiento y demonizar tanto la felicidad. La vida con sus altas y sus bajas, con sus pérdidas y ganancias, con sus luces y sus sombras, toda es real. Lo negativo existe. Es cierto. Pero lo bueno, lo positivo, lo maravilloso también es verdad y es posible para cada uno de nosotros. Ser feliz también es ser real…
Como siempre, les comparto esta reflexión con mucho respeto y todo mi cariño, por si les tiene sentido. Les quiero y me quedo corta. ¡Eeeeeh Juá!!!
Yz Cifredo [5.abril.2021]